Culpa y odio

Hola escribo por si alguien puede darme un consejo.
Hace tres años inicié una relación indebida con un compañero de trabajo.
Yo me puse de novia con mi pareja hace 14 años y convivo con él hace 7, tenemos un hijo, nunca tuvimos discusiones mayores y en general siempre nos llevamos bien y puedo decir que lo amo y me siento feliz con él. Pero aún así caí en esa otra relación más impulsada por lo sexual, por la emoción de sentirse deseada y quizás el peligro.
El año pasado no aguanté más y le confesé a mi pareja esa relación, fue terriblemente doloroso para él y también para mí, desde entonces no logro perdonarme a mí misma ni recuperar la misma conexión que solíamos tener, pero aún así seguimos juntos y lo intentamos. No sé como hizo para perdonarme, pero permanece a mi lado; al mismo tiempo me confesó una infidelidad suya de antes de que naciera nuestro hijo.
Sabiendo esto también sentí dolor, pero asumí que lo mío fue peor por haber sido de mayor tiempo.
El gran problema es que sigo trabajando con el mismo compañero, y aunque lo alejé un poco en lo personal seguimos manteniendo una conexión muy fuerte, hace el papel de mejor amigo y dice seguir enamorado de mí.
Yo no planeo dejar a mi esposo, nunca lo dudé, y no me siento buena persona por haber hecho lo que hice, pero al mismo tiempo me cuesta renunciar a esa relación y el deseo sigue presente entre ambos aunque no volvimos a tocarnos desde que hablé con mi esposo.
Otro obstáculo es el mismo trabajo, si renuncio a este empleo siento que pierdo una oportunidad muy grande en lo profesional, trabajé mucho tiempo para conseguirlo y sé que tal vez no vuelva a pasar. Económicamente sería saltar a un pozo. Y para colmo por nuestros roles laborales estoy prácticamente en permanente contacto con él.
Siento culpa y a la vez odio, ya que sé que yo misma me metí en este lío.
Yo quiero permanecer con mi esposo, a mi compañero a veces lo detesto porque lo ayudé a entrar en la empresa (encima) y está creciendo e incluso quitándome importancia en el trabajo, y por otro lado es el único amigo que tengo, no me gustaría sentirme sola. Pero nunca lo tomé como posible pareja, solo fue una aventura, jamás tendría una vida con él.
Mi esposo me ama, pero no puedo comunicarme tan fluidamente con él, y nunca es romántico ni muy expresivo. Tiene sus defectos, y lo que a él le falta terminé encontrándolo en el peor lugar, pero no quiero dejarlo, no imagino mi vida sin él. El tema es que no creo que cambie, y siempre me sentiré un tanto incompleta.
Bueno en definitiva no sé si se entiende, no sé si yo misma me entiendo, pero todo esto hizo de esta una de mis peores crisis afectivas. Gracias por el espacio.